Actitud
Si adoptamos las actitudes adecuadas en nuestras vidas, podremos crear conexiones más profundas y significativas con las personas con las que nos relacionamos. Estas actitudes individuales y colectivas ayudarán a su empresa a fortalecer una cultura de servicio.
Para lograrlo, debemos trabajar en las siguientes virtudes:
EMPATÍA
La virtud de compartir los sentimientos y pensamientos de otra persona poniéndose en su lugar. Si lo hacemos, lo que digamos o hagamos será lo correcto desde la perspectiva de la inteligencia emocional.
SERVICIO
La virtud de estar en constante disposición de servir y ayudar a otras personas, sin esperar nada a cambio.
HUMILDAD
Silenciar nuestras virtudes y permitir que la gente las descubra a través de lo que hacemos, no de lo que decimos. Es ser coherente entre lo que se piensa, se dice y se hace.