¿Qué significa ser un Virtuoso?
Un Virtuoso es una persona llena de virtudes y una virtud es un hábito de buena acción. Es una disposición natural de la mente, la voluntad y el corazón para hacer las cosas bien y para hacer las cosas correctas.
Para convertirnos en virtuosos tenemos que centrarnos en tres variables clave:
MÉTODO
A través del método haremos lo que hacemos con maestría.
ACTITUD
Gracias a la actitud, podremos conectar mejor con nuestro público.
PASIÓN
A través de la pasión encendemos la innovación. Lo ordinario deja de ocurrir y lo extraordinario comienza a suceder.
A través del método alcanzaremos la maestría. Si seguimos un método con disciplina y rigor alcanzaremos altos niveles de rendimiento y nos convertiremos en expertos en lo que hacemos. El método lleva a una empresa a elevar sus niveles de excelencia operativa.
Para lograrlo, debemos trabajar en las siguientes virtudes:
Magnanimidad
La magnanimidad es la grandeza del alma y de la mente. Es la virtud de soñar en grande y de enfocar esos sueños al bien de los demás y al nuestro.
Disciplina
La disciplina es la virtud de ejecutar con cuidado y excelencia.
Perseverancia
La perseverancia es el esfuerzo continuado para conseguir algo a pesar de las dificultades.
Si adoptamos las actitudes adecuadas en nuestras vidas, podremos crear conexiones más profundas y significativas con las personas con las que nos relacionamos. Estas actitudes individuales y colectivas ayudarán a su empresa a fortalecer una cultura de servicio.
Para lograrlo, debemos trabajar en las siguientes virtudes:
EMPATÍA
La virtud de compartir los sentimientos y pensamientos de otra persona poniéndose en su lugar. Si lo hacemos, lo que digamos o hagamos será lo correcto desde la perspectiva de la inteligencia emocional.
SERVICIO
La virtud de estar en constante disposición de servir y ayudar a otras personas, sin esperar nada a cambio.
HUMILDAD
Silenciar nuestras virtudes y permitir que la gente las descubra a través de lo que hacemos, no de lo que decimos. Es ser coherente entre lo que se piensa, se dice y se hace.
Si hacemos lo que hacemos con pasión, inspiraremos, evocaremos emociones y despertaremos los deseos de ir más allá. La única forma de fomentar y difundir la pasión en tus equipos es a través del ejemplo. Si las personas con las que trabajas ven y sienten la pasión y el amor que pones en lo que haces, te seguirán.
Para lograrlo, debemos trabajar en las siguientes virtudes:
AMOR
Cuando haces las cosas con pasión y amor, lo ordinario deja de ocurrir y lo extraordinario empieza a suceder.
COURAGE
El valor es la fuerza de voluntad que te permitirá superar el miedo y construir una disposición natural para explorar y experimentar.
PRUDENCIA
La virtud de la prudencia es una disposición natural de la mente y de la voluntad que te permitirá ver, analizar y decidir con acierto. Es esa voz interior que te dice lo que está bien y lo que está mal y que te hará elegir con sabiduría y actuar con altos estándares éticos.
El final de un gran concierto o una actuación se sella con una entusiasta y sentida ovación del público. Es una reacción natural para celebrar y reconocer el trabajo bien hecho por los músicos en el escenario.
Te invito a que hagas lo mismo cuando veas que una persona o un equipo se desempeña de manera extraordinaria. En este breve vídeo comparto algunas ideas sobre cómo puedes dar reconocimiento, de manera formal o no formal, y cómo mostrar señales de agradecimiento.
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Espero que estos videos hayan sido de valor, este es el último que compartiré. Por favor, siéntase libre de contactarme si puedo servirle de alguna manera. Espero que nuestros caminos se vuelvan a cruzar pronto.
